Me parece igual de ridículo pretender ir por casa con pijamas de verano en plano diciembre como querer estar a 20 grados en pleno agosto. ¿Sabéis la temperatura a la que hay que poner la calefacción para que la gente vaya fuera de casa con chaquetas de plumas y tú estés dentro en tirantes? Pues hay personas que la ponen.
Veinticuatro o veinticinco grados son perfectos para estar en casa en verano porque es una temperatura a la que ya no tendrás calor, y en invierno, los 20 grados no están nada mal para estar dentro de casa y, si te da frío, siempre puedes coger una mantita y sentarte frente al televisor para ver una buena película en el sofá.
Poner el aire acondicionado la calefacción a todo motor es una barbaridad, tanto para nuestros bolsillos como para el planeta, y debemos empezar a ser un poquito más conscientes de ello antes de que sea demasiado tarde.
Hemos hablado con Eco-cima.es, una empresa de venta, reparación e instalación de calderas, calentadores y aire acondicionado que tiene a sus espaldas muchos años de experiencia. Se trata de una empresa cuya base es la energía geotérmica, una energía renovable que respeta el medio ambiente porque es capaz de extraer el calor del interior de la Tierra a través de sistemas de captación especiales y un circuito frigorífico basado en un principio termodinámico que hace uso de líquidos anticongelantes. En otras palabras, que podemos calentar o enfriar nuestro hogar gracias a la energía proveniente del suelo, que ni daña ni contamina nuestro medioambiente y que, por supuesto, resulta más económica que la electricidad tradicional.
La energía geotérmica aprovecha el calor del interior de la tierra para crear energía de la nada y lo hace a través de una serie de yacimientos repartidos por toda la capa terrestre. En España, los mayores yacimientos (los que más temperatura alcanzan) se encuentran en las Islas Canarias y su principal ventaja es que la extracción de ese calor se hace de manera natural y no contaminante.
Es una fuente que disminuye la dependencia energética de los combustibles fósiles y de otros recursos no renovables y los residuos que produce son mínimos y ocasionan menos impacto ambiental que los originados por el petróleo y el carbón. Es un sistema de gran ahorro, tanto económico como energético y aunque utilizarlo para tener la casa en verano a 20 grados centígrados sigue siendo una barbaridad, ya que parece que hay población inconsciente que jamás pensará en el prójimo, puede que utilizar esta energía sea lo menos dañino dentro de las consecuencias que puede provocar en verano el uso masivo de aires acondicionados que funcionan a la vez agotando así los recursos del planeta.
Algunos Contras
Como todo, tiene algunas desventajas o contras que, aunque son menores que las de otras energías, también pueden causar algunos problemas:
- En yacimientos secos se han producido a veces microsismos como resultado del enfriamiento brusco de las piedras calientes, y su consiguiente fisuración.
- En ciertos casos puede haber emisión de ácido sulfhídrico que se detecta por su olor a huevo podrido, pero que en grandes cantidades no se percibe y es letal.
- Contaminación de aguas próximas con sustancias como arsénico y amoníaco.
- Contaminación térmica.
- Deterioro del paisaje.
- No se puede transportar, como energía primaria, salvo que se haga con un intercambiador y un caloportador distinto de las aguas del acuífero.
- No está disponible más que en determinados lugares, salvo la que se emplea en la bomba de climatización geotérmica, que se puede utilizar en cualquier lugar de la tierra.